Hoy toca hablar de Crónica
de una muerte anunciada, cosa que me compromete bastante y a la vez me emociona
muchísimo, ya que este libro forma parte de de las 100 mejores novelas en
español del siglo XX para el periódico El Mundo y es sumamente complejo. Sin duda, Crónica de una muerte anunciada es una obra característica tanto del
autor como del siglo y no podía seguir sin hablar de ella, pues además, es una novela clave de la literatura latinoamericana y, como era de esperarse, me encanta.
Bayardo San Román es un rico extranjero que llega al pueblo de Riohacha con la intención de encontrar una mujer para luego casarse con ella. Poco tiempo después, conoce a Ángela Vicario, una bella joven que ha crecido bajo el estricto control de su madre y que parece ser la elegida. Todo va de maravilla, pues parece que ambos, pese a sus limitaciones, han encontrado lo que buscaban. Sin embargo, lo rudo comenzará cuando la noche de la boda, Bayardo descubra que su esposa no es virgen y la devuelva a su casa, donde esta alegará que Santiago Nasar fue quien le arrebató su inocencia, dando origen a la caza del carnero, a manos de sus hermanos, Pablo y Pedro.
Bayardo San Román es un rico extranjero que llega al pueblo de Riohacha con la intención de encontrar una mujer para luego casarse con ella. Poco tiempo después, conoce a Ángela Vicario, una bella joven que ha crecido bajo el estricto control de su madre y que parece ser la elegida. Todo va de maravilla, pues parece que ambos, pese a sus limitaciones, han encontrado lo que buscaban. Sin embargo, lo rudo comenzará cuando la noche de la boda, Bayardo descubra que su esposa no es virgen y la devuelva a su casa, donde esta alegará que Santiago Nasar fue quien le arrebató su inocencia, dando origen a la caza del carnero, a manos de sus hermanos, Pablo y Pedro.
Basada en un hecho real
ocurrido en 1951, Márquez parte de esa vivencia para construir la acción central e hilar los sucesos, tratados con la exactitud de una crónica periodística. A partir de la experiencia, Crónica de una muerte anunciada se alza sobre la base de una historia similar, ocurrida hace muchos años, que se transforma en esta entrega a partir de elementos imaginarios, que son narrados por un investigador que va dejando hilos sueltos y que es la personificación de la crónica.
Como era de esperarse y como suele suceder en
las novelas de Gabo, desde la primera frase el lector sabe el final, pues abre
el libro diciendo. Con tan solo leer un capítulo, podemos conocer los detalles de la
muerte del personaje, los culpables y los cómplices, sin embargo, la manera en la están narrados
los pormenores del asesinato en ese pequeño pueblo en la Costa del Caribe, en
un período de unos cuantos días, es el atractivo del libro y lo que invita a
continuar la lectura, a pesar de saber el final. Gabo es un genio, porque través de una trama aparentemente sencilla y que
no da para mucho, deja clara su postura ante una sociedad llena de carencias, desigual y machista, ligada a una iglesia que solo le tira migajas de pan,
para la que la virginidad es sagrada y cuyo arrebato se paga con la muerte.
En fin, Crónica de una muerte anunciada aborda los numerosos prejuicios propios de nosotros, los latinoamericanos, a través de una reconstrucción de un hecho real que, además, deja ver la labor de Márquez como periodista, pues construye la acción a través de diversos puntos de vista, cual reportaje.
En fin, Crónica de una muerte anunciada aborda los numerosos prejuicios propios de nosotros, los latinoamericanos, a través de una reconstrucción de un hecho real que, además, deja ver la labor de Márquez como periodista, pues construye la acción a través de diversos puntos de vista, cual reportaje.
La devolución de Ángela Vicario supone la pérdida del honor de ambas familias, pues el hecho va en contra de lo
socialmente establecido. En consecuencia, las figuras masculinas de la novela buscan reafirmarse a través de la violencia, mientras que ella continua siendo un objeto que, además, es señalado y burlado por el crimen que cometió. Así, Márquez demuestra el peso del qué dirán y las normas que motivan
comportamientos absurdos e ilógicos que llevan a cabo dichas “venganzas”.
Dentro de la literatura latinoamericana, la
figura de la mujer virginal sometida al qué dirán y que se rige por las normas
establecidas que son dadas de generación en generación, es muy común y dentro
de la obra, queda expuesta esta figura antagónica del control femenino,construida a través del imaginario masculino, producto de la cultura histórica que ha
pasado a través del tiempo, que deja claro cómo el pueblo se esconde detrás de
estas normas sociales para acallar el peso de su conciencia, mostrando el eterno conflicto
entre lo social y lo individual a través de la figura negativa femenina
, cuya virginidad es condición para el honor y la dignidad.
El narrador testigo por el que apuesta García Márquez aporta una perspectiva muy original y objetiva de los
hechos. Este ahonda en distintos puntos de vista y le permite al lector construirse su propia opinión sobre el hecho. Sin descripciones demasiado
largas e innecesarias, el escritor colombiano aporta su perspectiva acerca del machismo,
las costumbres y la violencia latinoamericana.
Asimismo, Márquez marca una distinción entre
el acontecimiento de los hechos y la narración, pues la novela se divide entre la muerte de Santiago Nasar y las impresiones sobre
ello. En consecuencia, el asesinato de Santiago está en un pasado
distante, que puede deducirse por el uso de los verbos. Por contrario, el tiempo de la acción se marca por un tiempo
cronológico, pues todo lo ocurrido está marcado por las agujas del reloj: la
boda ocurre al mediodía, la noche de bodas se comienza a efectuar cerca de las
10:00 pm, ella es devuelta a las 12:00 am, Santiago se
entera a las 5:30 de la mañana y parte al puerto a las 6:00 siendo asesinado
entre las 7:00 y las 8:00 y termina alrededor del mediodía, dando un total de 24 horas de faena. En consecuencia, el tiempo no es cronológico, sino
fragmentado, pues todo se presenta en desorden, mezclando pasado y futuro
dentro del presente, en conjunto con la anticipación y repetición, pues el asesinato va y viene una y otra vez.
Y es una brutalidad porque cuando
el narrador cuenta el futuro de los personajes, lo hace en comparación con su
situación del momento anterior a la
muerte de Santiago. Además, guarda una estrecha semejanza con el tiempo
objetivo y subjetivo, pues para cada personaje el tiempo transcurre a una
velocidad diferente, con una perspectiva completamente distinta (subjetiva) con
respecto al resto (objetiva). Un ejemplo de ello sería cuando los hnos Vicario
preguntan el nombre de quién había sido el culpable: para Ángela se traduce
en un momento casi infinito, pesado, mientras que para ellos solo dura unos segundos.
Numerosos críticos afirman que quién narra
esta novela no es más que el mismo García Márquez a través de la figura
denominada como narrador – juez – autor, que muestra la agresión – transgresión
de la novela a través del “saber” de los acontecimientos en la acción; es
decir, es un narrador – juez – autor y sobretodo un personaje principal. Entonces, él ordena
su mundo de acuerdo como lo ve y como lo piensa, teniendo como función la
centralización de los hechos y acciones: todo parte de él y a él todo regresa.
Márquez se posiciona y se permite reflexionar acerca de lo ocurrido. Esto hace que el de su versión acerca de lo ocurrido y deje que el lector vea las consecuencias de los actos de los personajes, jugando con la narrativa y revelando lo que le parece conveniente, buscando los
indicios que justificaran la muerte de Santiago, dejando claro la inocencia tras dicho suceso, haciendo que el lector sea el juez que determine quién es el verdadero culpable.
En consecuencia, la reconstrucción de lo ocurrido parte de lo subjetivo y se mezcla con el humor negro y el realismo mágico que, en conclusión, se unen para hablar de la violencia cotidiana y de la importancia del honor y descargado en la mujer que, en este caso, acarrea en un lastre para los asesinos del que jamás podrán librarse.
Crónica de una muerte anunciada nos invita a
ser detectives y nos guía en el camino de la búsqueda de respuestas y motivos
para un asesinato que de buenas a primeras sabemos cómo ocurrió. En definitiva,
una obra divina, que me encanta y que es un buen acercamiento a la obra de
García Márquez y a la literatura un poco más adulta, así que espero que le den una oportunidad porque no se
van a arrepentir.
¡Hola, nuevas seguidoras del blog! ^_^ Este libro es sin duda uno de esos clásicos que en algún momento de tu vida tienes que leer sí o sí. La verdad es que no creemos que vayamos a leerlo en un futuro cercano, pero tal vez más adelante le demos una oportunidad. ¡Muy buena reseña! Un saludo.
ResponderEliminarMarta y Laura.