En pleno verano, Beto Milanés, cubano e inmigrante, sale a nuscar que alguien lo mate. En la comisaría se encuentra con un sargento calvo y obeso que ha decidido pedirle perdón a Mandy, su hijo, un travesti que vive con un modista armenio. El fantasma de una pianista va de aquí para allá intentando salvar a su hija. Un oscuro profesor de literatura vive en un bar, conversando con la mujer más bella del mundo. Los orishas bajan del Olimpo y acuden a la tierra con sus tambores. Tres muchachos que van a por cerveza se consiguen con el cubano que quiere morir, en un día de junio lleno de lluvia, luna y un perro descerebrado.
No
es un libro sencillo, ni tampoco para cualquier persona, pero pocas personas
logran tan maestría en un libro como este. Caracol Beach te hace sentir el
realismo mágico en tus venas, como un sueño, donde parece que todos están
locos, pero tan solo es la fachada para entender el mundo en el que viven, en
una soledad que los perturba, enfrentándose con el aislamiento. Todo se une en
esta novela, llena de personajes que entretejen sus historias en circunstancias
llenas de amor, lealtad, locura y situaciones extrañas que hacen de este un
relato profundo lleno de delirios y realidad.
Leer
a Eliseo Alberto es como pelar una cebolla: cada vez construye capas más y más
densas, más oníricas, en una vorágine enajenada, que da pie a docenas de
personajes relevantes, complejos, inverosímiles, creando, con un lenguaje audaz, un destino en el que cada uno
de ellos rompe con lo cotidiano. Ellos son inocentes o culpables en una escala
de grises dentro de la realidad violenta, injusta y loca, que se reinventa y
actualiza al mejor estilo de las tragedias.
Es
una novela de final de siglo y de milenio. El cubano posee una narrativa llena
de imaginería verbal llena de expresiones y metáforas propias, en conjunto con
un refinado oído que capta los matices e un coloquial castellano con claras
referencias cubanas. Hace un exhaustivo y exigente tratamiento estilístico para
lo que se cuenta y cómo, saliendo del estereotipo y mostrando una conclusión
social, relacionada con el poder del amor, pues “no amar a nadie es una
inmoralidad”.
Todos
los personajes luchan contra su destino, aunque no hay nada que hacer contra
él, ya que todos los elementos se reúnen en el espacio y el tiempo correcto
para que la tragedia ocurra. No entienden, no hay nada que entender. En
definitiva, una novela moderna, llena de un lenguaje lleno de modismos
caribeños, con personajes dignos de amor y compasión que resurgen de la vida y
que intentan abordarla como va viniendo, vamos viendo.
hola! estoy basicamente husmeando tu blog jaajaja, me sorprende gratamente encontrarme con un blog Venezolano <3 (because i'm too)
ResponderEliminareste libro me llama mucho la atencion y lo apuntare en mi lista, creo q es el tipo de historia que terminan enamorandome
un besote, te deje varios comentarios por tus post