Serrano versiona el
clásico de Luoise M. Alcott situado en Chile. Refleja las personalidades de sus
protagonistas, tal cual como la obra inicial, pero en esta ocasión no son
hermanas, sino primas. Amy se llama Lola, guapa, egoísta y ambiciosa; Beth es Luz,
dulce y solidaria, presente en espíritu; Meg es Nieves y Jo, Ada. Se
reencuentran desde el recuerdo de su niñez, narrando sus diversas experiencias,
reconociéndose a través de sus diferencias.
Serrano le es fiel a
la personalidad de cada una de las mujercitas de Alcott y al mismo tiempo le da
su toque moderno a los personajes, que cargan con una tragedia personal. Nieves
parece ser devota de su marido e hijos, sin embargo, oculta una ansia secreta
de transgresión; Ada se ha convertido en escritora, Luz se cuestiona su
sacrificio por los demás y Lola no encuentra satisfacción en su anhelo de reconocimiento
por su belleza. Entre amores y odios, las cuatro primas chilenas sobreviven a
una dictadura llena de exilios y muertes, siempre intentando salir adelante en
una sociedad que navega en su contra.
Hasta siempre,
mujercitas habla del deseo, el destino, la felicidad y el engaño, a través de
la revisión de un clásico, que le permite concluir la dimensión eternamente
presente de algo a lo que no se puede renunciar. Serrano penetra en la psique
de sus personajes, para mostrar su forma de ver el mundo, a través de las
mujercitas del siglo XIX y las del XX, porque los mandatos no son muy distintos
en ambas épocas. “Lo importante es que ellas siguieron los mandatos al pie de
la letra y ustedes, ¿qué hicieron ustedes con ellos?”, dice.
Sus vivencias se
refleja en el presenten, actualizando los problemas a través de las
personalidades de las Mujercitas del siglo XXI. En definitiva, una reescritura
interesante, con tono propio, que me ha gustado muchísimo y en la que me he
visto reflejada.
¡Hola!
ResponderEliminarNo sabía que existía este libro pero puede ser muy interesante, ver a nuestras mujercitas ya mayores, ver como han evolucionado y ese toque en la personalidad diferente que les da la autora. Me lo apunto :D
¡besos!