Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes, Elena Favilli y Francesca Cavallo, #LEOAUTORASOCT.

Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes deja de lado a las princesas y a las hadas, para traer a 100 mujeres que han cambiado el rumbo de la historia. Desde astronautas hasta tenistas, los personajes de estos cuentos inspiran a las niñas – y no tan niñas -  a sonar en grande y a alcanzar sus sueños. A través de figuras como Frida Kahlo, Jane Goodall, Coco Chanel, Nina Simone, las Brontë o Marie Curie, estas mujeres valientes vienen acompañadas de ilustraciones hechas por 60 artistas en todo el mundo que reafirman la vida de aquellas que, de alguna manera, cambiaron el mundo.

Cien ejemplos de determinación y audacia componen este libro, cargado de historias que, admito, desconocía. Es un gran libro para despertar la curiosidad sobre el feminismo, pues hace visible a una cantidad de mujeres que la historia se ha encargado de dejar en el olvido. Sin embargo, considero que peca en el sentido de llamarlos “cuentos”, pues son más bien una especie de monografías de una página, que sirven como introducción a la vida de quienes se narra.

Me faltaron mujeres y me sobraron algunas. Casi todas son admirables, pero tengo mis excepciones. Otra cuestión que no me gustó es que abordaron mucho, sin tomar en cuenta que en una página es muy poco lo que se puede tratar, dejando de lado el final de esos personajes (aunque esto lo entiendo, porque va dirigido a niños y, normalmente, no acabaron muy bien). A Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes le faltó diversidad, pues la mayoría de los personajes son blancas, gringas o primer mundistas. Con esto no quiero decir que no haya latinas o negras, pero sí que no son muchas. Y eso, para mí, falló (por ejemplo, Sor Juana Inés de la Cruz no está).

Aún así, aplaudo la iniciativa al crear un libro que hace la diferencia como este. Me encanta por lo que significa, por la marca que hace y por lo feliz que me pone saber que cada día nos vemos más. En definitiva, un libro sobre grandes mujeres para niñas, que nos recuerda que, a pesar de que se ha intentado dejar de lado, siempre hemos estado ahí, haciendo avanzar a la humanidad un poquito más. Vivan las mujeres. Siempre.